Oleo sobre tela. 2003. 90 x 70 cm.
Primer plano: Una mujer sentada de espaldas sobre un cubo blanco. Dorso desnudo, la columna firme y la cabellera rubia por debajo de los hombros. Figura esbelta, brazos fuertes, femeninos. Sobresalen las nalgas que se acentúan por la curvatura del cuerpo. Apenas se perciben rasgos del perfil.
Segundo plano: Un espejo en el que se refleja la mujer del primer plano. Está desnuda, pero sus piernas están cubiertas por un lienzo blanco. Su abdomen es firme, tiene un tatuaje extraño, sus senos no son pequeños ni grandes, sencillamente son jóvenes. Sostiene en las manos un papel. Quizá una carta. Pero no lo está viendo. Mira fijamente al espejo, en sus ojos verdosos se dibujan rasgos de tristeza, de miedo, de duda. Como preguntándole a la chica que se refleja si le entra o no al negocio que le propusieron. Al fin… Nomás será por un tiempo, pa’ salir del apuro.
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8 comentarios:
Uy Fernanda,
Este ejercicio tuyo me dejo sin saber que decir.
Lo unico que se me ocurre es decirte que celebro que te dieras la oportunidad de explorar otros temas en la escritura, por que tu talento da y para mucho.
saludos,
Vaya, interesante concepción del yo enfrentandose a si mismo. Sobre todo el hecho de que esté desnuda, eso significa que esta desprovista de clichés, se presenta tal cual es sin importar que esté de espaldas al espectador.
Un lenguaje sencillo pero crudo.
Palomilla ψ
Me encanta que no sólo describes visualmente, sino también la intención del pintor.
Esta frase se llevó la noche:
"sus senos no son pequeños ni grandes, sencillamente son jóvenes."
Beso.
Tu si hiciste un oleo. Linda descripción, lo que mas me conmueve es el cierre de pensar, de la duda de si será por un rato, solo por un rato
besos
Interesante. Evocador. Insinuante.
Yo, ¿qué podría decir? Aparte, sólo soy muy curioso, pero me gustaría aprender a expresar algo así. Me gustó, igual que los otros. ¿Qué más puedo decir?...
Vamos a ver...
Curioso...
Es curioso. De modo que al abrir los ojos, flexiona su cuerpo, agradeciendo al movimiento su existencia, tanto o más que la
Luz al Día, despidiendo con melancolía esa soltura del
descanso.
Se levanta con agilidad, sin titubeos. Sabe que la Pereza
puede cubrirlo con su sedoso y cálido manto, y así impedirle
continuar con su misión: vivir.
Se observa en el espejo de agua. Y sonríe, quizás cansado, tal vez estoico. La misma sonrisa de siempre, en el rostro moreno de tuareg. La quijada, marcada, se mueve para saludarse a sí mismo, mientras estira el cuerpo, duro y correoso, hacia las azafranadas nubes que ya se insinúan , para también saludar (como siempre) a la brisa, los árboles y el amanecer.
Se lava con el agua fresca, corriente. Y ésta fluye, como si de una acuarela se tratara, desde el cráneo resplandeciente,
por el pecho y la espalda, por brazos y piernas, que reciben felices la frescura como un saludo de la Naturaleza.
Y el Gran Pincel, la Luz, aherrojada en las sombras de las cicatrices de años de adversarios y de multitud de momentos, se agazapa, cautelosa, penetrante, ¿temerosa?... dispuesta a reflejar el contorno de los músculos y tendones, que sostienen este cuerpo, paciente y adolorido, en pie, al fin despierto.
Se asoma al espejo. Se acerca para tratar de describirse mejor. Pero se aproxima demasiado. Cae en él. ¿O a través de él? Y despierta, sabiendo que es un hombre que soñó que era un Unicornio. ¿O un Unicornio que empieza a soñar que es un Hombre?
Gracias a To2 por sus escritos. En general, es un placer leerlos.
Que tengan un Día Luminoso, dondequiera que escriban y lean, son los mejores deseos del
Especular (adj.) Unicornio.
Fer,
Del Relato, me quedo con la pregunta siguiente: ¿Y que es lo que le propusieron?
A pesar de tener una buena propuesta dividiendo en planos la pintura, siento que le faltaron cuidados y pinceladas.
No logro encontrar en la pintura a la persona que describe, total, me pierdo en la duda y del texto, rescato la pregunta.
saludos
KAOS
cORRE ve a ver la SOnrisa Koreana
ve, que ta bien vonita
anda
anda q se va
se va
deja de seir
corre
koleanaaaaaaaaaaaaa
Un texto muy fresco, mi estimada Fernanda, me encantó tu estilo. Los detalles no son tan minuciosos, y sin embargo, comunicas lo suficiente para formar una imagen entera.
Te envió un abrazo, querida amiga.
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